Ayer tarde después de la cabalgata de Reyes nos juntamos con unos amigos a tomar algo en un bar cerca de la zona donde vivimos, después de haber tomado varias cervezas y ya preparándonos para irnos para casa, en ese momento entro el Rey Mago Baltasar del día, un negrito vendiendo una especie de dragón que se convertía en una bandeja, la verdad es que era bastante caro, para ser vendido por bares, ya que nos pidió 30 euros por ello, uno de mis amigos le regateo de forma bastante agresiva ya que le ofreció 5 euros y el dijo que no podía venderlo tan barato y que como mucho podía bajar cinco euros, entonces mi amigo le dijo que no, en ese momento el negrito en vez de irse, empezó a cantar una cosa rara que pudimos descifrar como que el año este, en el que hemos entrado nos fuera muy bien y que hiciéramos mucho el ñaca-ñaca y nos regalo a cada una de las parejas una pulsera y a mi hijo un elefante pequeñito de barro. es el mejor mejor regalo y el que mas ilusión me ha hecho en la vida, aparte de no esperar esto, pensé en ese momento, como una persona que seguro que no tiene ni un techo fijo ni para dormir estas tan señaladas noches, derramaba tanta alegría y encima nos regalaba una pulsera, sin ningún valor económico, pero en este caso si sentimental, ya que me llego a lo mas profundo de las entrañas. Yo no soy de pulseras, ni maneas, ni artilugios colgantes, pero este, me ha causado tanta ilusión que pasara tiempo antes de que me lo quite.
Hoy me vais a permitir que diga "La vida esta llena de Reyes que con una sola sonrisa son capaces de hacer feliz a cualquiera".
No hay comentarios:
Publicar un comentario