IMBECILES 2-01-2014

Ayer empezó el nuevo año y es entonces cuando empezamos con las gilipollezes de voy a dejar de fumar, voy a perder los kilos que me sobran, de este año no pasa, voy a ir a ......... Y así, bobada tras bobada, empezamos a rellenar el año. En esta vida hay muchos que viven de lo absurdo, de la hipocresía, del trabajo de los demás, de criticar al prójimo y en algunos casos, todos esos que no saber enfrentarse a la vida pagan sus desilusiones y frustraciones con el que tienen al lado, ya sea su amig@, compañer@ o amad@. Todo esto suele desencadenar siempre tiranteces tanto en el ámbito laboral, en el  familiar y en el social. Normalmente todas esas personas que seguro, que todos los que leáis estas líneas conocéis a más de un@ y además seguro que pululean a vuestro alrededor. Yo entiendo que no os queréis dar cuenta de como son muchas veces por ser amigos o familiares y creéis que mirando hacia otro lado lo arregláis todo y lo único que los hacéis es daño, porque ell@s se creen el ombligo del mundo. Si es cierto, que mirar a alguien a los ojos y decirle que es un imbécil, duele, y sobre todo, le duele al que lo dice ya que normalmente el imbécil no se da por aludido y sigue en sus trece.

Yo, este año me sigo proponiendo mirar al imbécil a la cara y decirle que es un imbécil, la verdad que me suelo llevar bastantes chascos ya que siempre me llevo la charla de algún otro imbécil que me dice que el imbécil soy yo y que no me sé comportar o que no se respetar a los demás.
Hoy la frase de Jacinto Benabente me viene al pelo ya que dice "La disciplina consiste en que un imbécil se haga obedecer por los que son mas inteligentes".